Miedo a que la mierda de tus uñas se propague hacia tus manos, y se te pudran y se te caigan un día que las levantes para examinarlas. La gangrena estará esperandote, acechándote en las sombras. Donde todos los fantamas, los temores y los agobios gritan tu nombre, te proclaman desde el lado oscuro de la razón. Para que vayas a verlos en brotes psicóticos y temblores paranoicos. Pavor a los tonos grises perennes, en esas ensoñaciones tan reales como los días de otoño cercanos al invierno.
Tormentas y naufragios al enfrentarte a estos mares. Criaturas abisales no tardarán en subir a buscarte, para hincarte los dientes, atraparte en sus cepos y arrastrarte hundiéndote hacia la inmensidad... la presión podrá contigo antes de que te desangres por tus heridas.... tu cuerpo explotará por los ojos, tus pulmones, tu boca, tu espíritu.
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